miércoles, 11 de abril de 2012

Capitulo #21 "Asesino"

—¡Jenyfer! ¡Despierta!

El grito me despertó. Aún resonaba en mi oído la voz aguda de mi madre, quien había tenido que tirarme un vaso lleno de agua para que despertara.

—¡Esta fría! —exclamé.

—¡Jenyfer, parecías una completa loca! —dijo mi madre ayudándome a levantarme.

Mis piernas temblaban y reclamaban que alguien más ayudara con mi cuerpo. Sentí la necesidad de ver mis pues.

No había señales de suciedad.

Tenía miedo de que mis sueños fueran como los que pasan en esas películas de terror, en donde el protagonista se despierta y ¡ve que sus pies realmente están sucios porque todo fue real!

De acuerdo, veo demasiada televisión.

Mis cuerpo, exteriormente, no daba señales de haber vivido aquel sueño, pero mi corazón estaba latiendo con fuerza. Estaba tan acelerado como si hubiera corrido un maratón…

—¿Jenyfer? —llamó mi mamá. Al parecer me había perdido en mi mente.

—¿Si?

—Oh nada, solo trata de dormir… —se despidió.

Quería un beso de buenas noches como si fuera pequeña. Y me regañé por ser tan inmadura.

El silencio de la noche estaba siendo reconfortante. Los grillos cantaban en el jardín, y de vez en
cuando se escuchaba un pájaro.

Traté de matar el tiempo imaginando caras en el oscuro techo. En este momento no quería pensar en el significado de mi sueño. Mucho menos en David.

***

Las primeras luces del amanecer ya empezaban a iluminar la habitación. ¡Ya imaginaba las ojeras que tendría! Pero ganaba más el miedo. El miedo a soñar.

Era un día más de escuela. Me levanté como siempre y seguí mi monótona rutina.

Llegó la clase de gimnasia y tuvimos que salir al campo. Odiaba esta clase, sobretodo por el esfuerzo que suponía.

Sentí la necesidad de irme y saltármela, así que seguí mis instintos. Tal vez no siempre acertaba en lo que hacía pero si me arrepentía, ya sería después.

Fui directamente hacia los baños de las chicas y me adentré ahí. No quería perderme una clase en ese lugar pero no tenía a donde ir.

Bajé la tapa del inodoro y me senté. Estaba dispuesta a relajarme un poco y dormir lo que no había podido. ¡Qué ridículo, en un baño! No importa, mientras pueda…

Alguien tocaba la puerta.

—¿Si? —pregunté.

—¿Jenyfer? —preguntó una voz femenina.

Me apresuré a salir del baño. Era vergonzoso estar hablando normalmente mientras, tal vez, la chica pensaba que estaba haciendo mis necesidades. Casi solté una carcajada.

—Te busca alguien allá afuera… Un chico —dijo.

Le di las gracias y salí. Rogué al cielo para que fuera Peter.

—Con que saltando clases ¿eh?

Maldita suerte que tengo.

—No te incumbe, David. ¿Qué quieres? —pregunté intentando sonar más que grosera.

—Platicar. Creo que ayer dejamos pendiente algo.

—No veo qué cosa. Digamos que está aclarado: tu y yo no debemos seguir hablándonos ni nada
que se le parezca.

—¡No seas infantil, Jenyfer! Es la cosa más absurda… ¿Tu novio ya te lo prohibió? —preguntó tenso.

—A diferencia tuya, él si es una buena persona.

—Claro, espero que lo beses igual que a mí... —contestó con sarcasmo.

Su comentario, molesto, me hizo pensar. ¿Cómo lo besaba?

No entiendo eso de besar de diferentes formas…

Claro, las sensaciones al besar a David fueron diferentes de las que con Peter pero eso era por… las formas de sus labios, supongo.

—Pasé una mala noche, deja de molestarme —le supliqué a David. Los pasillos se extendían y parecían interminables. Mis ojos estaban secos y necesitaban de una buena siesta. Sentí un ligero mareo y entonces…

—¿Jenyfer? —preguntó David. Su voz se escuchaba angustiada, pero tal vez solo había sido un reflejo.

Comenzaba a ver borroso, y entre tanto movimiento en mi cabeza, recordé que no había desayunado nada. Conmigo traía solo aquel sueño que me embriagaba de miedo.

No quería dormir.

—Asesino —mascullé.

La palabra había salido de mis labios sin pensarlo. Sabía que los sueños era meramente invenciones de nuestra mente, pero algo en ellos, en los míos, se sentía real.

Vi lo ojos de David abrirse y desvanecerse frente a mí.

O David acababa de irse como si fuera humo, o yo estaba demasiado mareada. Estos síntomas no eran exactamente por no haber dormido o comido…

Mi cuerpo parecía ir y venir en todas direcciones, yendo de un lugar oscuro hasta aquí y de regreso.

_________________

HELLO!
Gracias por todo el apoyo, :)

De verdad que sus comentarios me sacan una sonrisa. Cuando veo que ponen que les gusta mi novela, no saben ni cómo me siento, xD.

Hago esto de corazón y aunque no tenga mil comentarios sé que tengo a unas personas maravillosas que leen esta novela.

¿Saben?, siento que no hago esto en vano. ¡Qué Dios l@s bendiga!

4 comentarios:

*Kuroneko* dijo...

Aww, no te preocupes! Para eso estamos las seguidoras, no? Para animarte! :3 Pobre Jen >.< Y en serio, ya no sé qué hacer con David... Lo amo, pero la está volviendo loca a la pobre Jen XD. Y me gusta tu novela!! Así que nada es en vano <3

Laly Michelle dijo...

me gusta!! ya quiero saber el porque de ese titulo y cada vez me acerco mas! david me encanta!!"

Anónimo dijo...

Mai Gudnes, cada vez se pone mas y mas interesante, este triangulo amoroso me tiene patas arriba. Síguela, por cierto, para eso es que estamos nosotras no?

Khalessi dijo...

Vale!! q crees? seguire con mi quinto elemento. Lo visitan sin hacerle promocion jeje. La seguire escribiendo, para que me hagas promocion si puedes con tus leyentes ;)....ya te habia dicho que amo a David? si no... AMO A DAVID! es tan maldito, pero... jejejeje. Por cierto, soy Karen, futura señora de Dekker... ya entendi que Keynes is yours ;)